INTERNACIONALES
5 de febrero de 2025
Venezuela, Cuba y Nicaragua, los bastiones del autoritarismo que desafían la democracia en América Latina
El informe Latinobarómetro 2024 presentó un panorama complejo de la situación política y social de la región, con avances y retrocesos
El informe Latinobarómetro 2024 presentó un panorama complejo de la situación política y social de América Latina, revelando tanto avances como retrocesos en el camino hacia la consolidación de la democracia.
En 2024, el apoyo a la democracia en América Latina alcanzó un 52%, un incremento de cuatro puntos porcentuales respecto al año anterior, lo que refleja un leve repunte tras años de incertidumbre y crisis políticas.
La confianza en el sistema democrático en países como México, República Dominicana y Argentina muestra que la alternancia en el poder puede revitalizar la percepción de la democracia, aunque este fenómeno no es generalizable a toda la región.
A pesar de la leve mejora en el apoyo popular a la democracia, el informe destaca el deterioro democrático en países con regímenes autoritarios consolidados, como Venezuela, Cuba y Nicaragua.En Venezuela, la crisis democrática se profundiza con un régimen de Maduro que, pese a las denuncias de fraude en las elecciones de 2024, sigue controlando el poder con el respaldo de Rusia y China. La manipulación electoral y la represión política siguen siendo los principales mecanismos de control de la dictadura venezolana, que se mantiene firme gracias a los apoyos externos que recibe.
Cuba, por su parte, sigue siendo un bastión del totalitarismo en la región. El régimen de Raúl Castro y, más recientemente, su sucesor Miguel Díaz-Canel, se sostiene gracias a las alianzas internacionales, particularmente con China y Rusia, que brindan apoyo económico y político ante las sanciones impuestas por Estados Unidos. La falta de libertades políticas, la represión de la oposición y la censura de los medios de comunicación son elementos estructurales del régimen cubano, que sigue sin mostrar signos de apertura política.
Un factor determinante para entender la persistencia de estos regímenes autoritarios es la influencia de potencias extranjeras, particularmente Rusia, China e Irán.
Estados Unidos, a través de sanciones y presiones diplomáticas, ha intentado aislar a los regímenes autoritarios de la región, pero su influencia ha sido limitada, especialmente en países donde las alianzas con Rusia y China han fortalecido los regímenes de izquierda, como en Venezuela y Nicaragua.
En cuanto a Irán, su apoyo político a Nicaragua y Venezuela refuerza la línea autoritaria de estos regímenes, mientras desafía la influencia estadounidense en la región.
El informe también subraya que el camino hacia una democracia consolidada en América Latina no solo depende del fortalecimiento de las instituciones políticas, sino también de la resolución de las desigualdades sociales.
A nivel regional, el pesimismo económico sigue siendo elevado, y la delincuencia se presenta como el segundo problema más relevante para los latinoamericanos, solo por detrás de las dificultades económicas.
El panorama de América Latina sigue siendo incierto. Si bien hay avances en países como Argentina, donde la alternancia en el poder ha sido vista como una victoria para la democracia, la región sigue siendo vulnerable a las tentaciones autoritarias.
En cuanto a los regímenes autoritarios, Venezuela, Cuba y Nicaragua siguen siendo los principales puntos de conflicto en la región. El informe de Latinobarómetro 2024 demuestra que, a pesar de las dificultades, los ciudadanos de estos países no han renunciado a sus aspiraciones democráticas.
La pregunta es si podrán prevalecer frente a los sistemas autoritarios que se perpetúan gracias a la influencia de potencias extranjeras y la falta de presión interna y externa efectiva.
Las potencias internacionales jugarán un papel clave en este proceso, pero será la voluntad popular y la fuerza de las instituciones democráticas lo que determine si la región avanza hacia una consolidación democrática o se inclina aún más hacia el autoritarismo.